Esta pequeña capilla es uno de los testimonios de los antiguos orígenes de algunas partes de la Colonia del Valle, en este caso el barrio de Actipan, hoy prácticamente absorbido por la dinámica comercial de los alrededores de Galerías Insurgentes y cambios tanto en la población de la zona y su arquitectura original conservándose únicamente contados ejemplos.

Este templo es pues uno de ellos, ubicado sobre el calle de Búfalo en el sitio donde termina la calle de Tigre. Se trata de una pequeña construcción que nos recibe con un pequeño atrio con una arcada cubierta por bugambilias separado de la calle por medio de una reja con pilares. La fachada de la capilla es sencilla en ornamentación y está integrada por una portada rematada por una única torre campanario. Al centro de dicha fachada se encuentra un arco de acceso labrado en cantera con sobrias líneas neoclásicas en cuya piedra clave se delata su fecha de construcción: 1897. Sobre el arco se ubica con nicho con la imagen de la virgen de la Guadalupe y un friso que delimita la parte superior del basamento.

La capilla cuenta con una única nave con un ábside octagonal y un coro de madera en tapanco. El interior es austero y de más reciente factura, a excepción del altar el cual presenta un altar con pilares y frontón neoclásico dorado.